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MARX Y LA CRISIS ECONOMICA DEL CAPITALISMO

Por: GUSTAVO ESPINOZA M. (*)
            http://nuestrabandera.lamula.com 

Recientemente, y por iniciativa de los Amigos de Mariátegui, fue presentado, en la Casa Museo del Jirón Washington el libro “Teoría económica del Capitalismo. Análisis marxista actualizado”, cuyo autor es Francisco Chaparro Zapana, actual Vicerrector de la Universidad Nacional San Luís Gonzaga de Ica. 

El evento, tuvo lugar la noche del jueves 3 de febrero y contó con una masiva concurrencia, integrada en buena medida por jóvenes estudiantes y trabajadores convocados para el efecto.

Lo primero que debiera destacarse es que el autor del libro –un tomo de 873 páginas que contiene XXI Capítulos a más de una extensa  bibliografía- es un peruano de origen muy humilde y de elevados méritos académicos y humanos.

Francisco Chaparro nació, en efecto, en una familia campesina de origen indígena. Vio la luz en la Comunidad de Isani, en el departamento altiplánico de Puno y tuvo una educación inicial aymara, a partir de la cual pudo proyectarse enfrentando los duros retos de la discriminación y el desamparo.

Su educación básica la hizo, sin embargo, en la ciudad de Tacna, donde asimiló los elementos básicos de una cultura que no le fue originaria. Ya joven, postuló a una beca y estudió economía en la Universidad Patricio Lumumba, en Moscú en los inicios de los años setenta.

Más tarde volvería a la hoy extinta Unión Soviética para doctorarse en economía y filosofía a mediados de los años 80 y concretar así una sólida formación académica, la misma que aplicó en el Perú con reconocida solvencia.

El libro que presentó el economista Rigoberto Ferreyra,  forma parte de una trilogía. Se complementará con dos investigaciones de próxima publicación. Una, referida a las tendencias del desarrollo socioeconómico y la perspectiva de la democratización. Y la otra, a la Historia, la Ciencia y la Lógica.

Serán, sin duda, valiosos aportes al estudio marxista de los problemas de nuestro tiempo y a su vínculo con la realidad de nuestros pueblos.

El objetivo declarado del autor es contribuir a la renovación metodológica de la investigación marxista de la economía. Objetivo, éste, por cierto, no desdeñable en un mundo -y sobre todo, en un país- en el que muchos han cantado himnos fúnebres al pensamiento científico y han optado por apostar a las prédicas más protervas del neo liberalismo, impuesto a espaldas de los intereses nacionales y de la voluntad de la población.

La publicación es, ciertamente, el aporte más significativo que un peruano haya hecho en torno a la materia en las últimas décadas, y tiene la virtud de aparecer en una circunstancia signada por acontecimientos trascendentales tanto en nuestro país como en el exterior..

Se complementa, sin duda, con los calificados estudios de Carlos Tovar quien es hoy en el Perú uno de los impulsores del análisis del pensamiento Marxista y su vigencia.

La desaparición de la URSS y la caída del socialismo en los países del Europa del este, la profundización de la crisis del capitalismo en descomposición que correo las bases mismas de las sociedades opulentas de occidente, y el ascenso combativo de los pueblos en todos los continentes que se expresa ahora en los acontecimientos de Túnez, Egipto y otros países árabes del norte africano y el medio oriente; constituyen un reto para quienes están en condiciones de aportar a la evolución del pensamiento, pero también a la afirmación de un mensaje de esperanza en el porvenir de las naciones.

Fruto de un trabajo prolongado -más de treinta años de estudio y análisis de los problemas que agobian a nuestras sociedades- este libro tiene por objeto reformular y actualizar elementos candentes del debate ideológico  y observa una configuración estructural propia que combina la teoría general del capitalismo creada por Carlos Marx, con la teoría del imperialismo desarrollada magistralmente por Lenin

Como lo subraya el autor, “esta combinación dialéctica puede ser lograda sólo si en los temas de la teoría general las categorías y las leyes económicas respectivas son re actualizadas en su interpretación, no sólo en forma general, sino también en sus manifestaciones especificas en la época del imperialismo”.

Uno de los aspectos de mayor importancia -y actualidad- en la obra que nos permitimos comentar alude al sistema económico mundial capitalista y al capitalismo imperialista globalizado, recogido en los capítulos XIX y XX y en los que se abordan las distintas formas que han adquirido las relaciones económicas internacionales del capitalismo y su proyección en el mundo globalizado de nuestro tiempo.

A partir de las formulaciones doctrinales recogidas en el “Manifiesto del Partido Comunista” de 1848 y de “El Capital” -la obra cumbre del pensamiento marxista- Chaparro augura un complejo periodo para el mundo en los próximos años.

Registrando los elementos de la crisis actual en todos los órdenes -económico, político, biológico, energético y ecológico- sostiene sin embargo que es posible enfrentar los desafíos planteados y reconstruir las sociedades de nuestro tiempo en una perspectiva de nuevo tipo estructurando una sociedad socialista que responda a las exigencias de la contemporaneidad.

Poniendo énfasis en la tesis general del optimismo histórico, sostiene la posibilidad de forjar -a partir de la lucha de los trabajadores y de los pueblos- un modelo socialista superior al abatido en el pasado reciente, que sirva de base para la sociedad comunista, objetivo estratégico de la humanidad.

Este aporte aparece en el Perú en un momento singularmente significativo, cuando casi el 70% de los peruanos -según las encuestas formales- recusa el modelo neo liberal vigente y demanda que éste sea reformado parcial o radicalmente, de tal modo que se ponga  coto a los abusos del Gran Capital y se abra paso a una economía social más humana y más justa.

(*)  Del Colectivo de Dirección de Nuestra Bandera 

MAYORÍA DE MEDIOS LIMEÑOS NO ABORDAN ENTRETELONES DE LOS DECRETOS DE URGENCIA

Por: Guillermo Olivera Díaz

1. El Decreto de Urgencia (DU), lo dicta o expide el Presidente de la República y lo aprueba el Consejo de Ministros en acta que suscriben sus miembros, al amparo de los Artículos 118°, inciso 19 y 125°, inciso 2 de la Constitución Política. Para su dación no se requiere ninguna intervención del Congreso de la República ex ante; ninguna suerte de delegación de facultades legislativas.
Es una norma jurídica que tiene “fuerza de ley”, pero no es una ley formal y sólo se dicta por expresa permisión constitucional como “medida extraordinaria” o excepcional, por ejemplo, en el caso de una invasión extranjera, un terremoto, una inundación o un cataclismo que haya originado la caída de un meteorito, etc., en materia “económica y financiera, cuando así lo requiere el interés nacional y con cargo a dar cuenta al Congreso”, el cual puede modificarlo o derogarlo.
Por ende, es inconstitucional si modifica o deroga leyes ordinarias u orgánicas que haya expedido el parlamento para el normal desarrollo de las actividades del Estado.
La regla es que el Poder Ejecutivo carece de potestades legislativas, siendo los Decretos de Urgencia una excepción, en la forma restrictiva que la Constitución ha previsto.
2. Ausencia de definición legal.- Este tipo de norma palaciega, con desventura hay que decirlo, fuera de los conceptos constitucionales antes reseñados y subrayados, carece de una definición constitucional o legal. No hay norma que desarrolle el alcance de lo “extraordinario” o “urgente” de la medida, el requerido “interés nacional” y la misma “fuerza de ley” que tiene este decreto, lo cual ha servido para prostituirlo hasta convertirlo en instrumento delictivo, sin que el Congreso haya dicho esta boca es mía.
Así como el estafador se vale del vil artificio engañoso, que puede ser un contrato formal de arriendo o de compra venta, que hace cera y pabilo de su víctima y el vulgar ladrón que con destreza y a veces violencia despoja de sus bienes al desprevenido agraviado, del mismo modo el gobernante, que ocupa Palacio de Gobierno, llámese Fujimori, Toledo o Alan García, se sirve del DU para pecular, es decir, apropiarse o utilizar para sí o para otro los dineros del Estado o también para corromper a terceros. Ejemplos tenemos de sobra. Este Decreto es como el arma homicida; es útil para delinquir.
Lo extraordinario, urgente o excepcional, incluido el interés nacional, quedan al mero arbitrio y autocalificación del gobernante crápula y garitero. Por eso es que la prensa nacional no se ocupa de este tipo de normas, pues con el producto medra también, vía el avisaje.
En la Argentina se los denomina “Decretos o Reglamentos de Necesidad y Urgencia”. Para el tratadista Juan Carlos Cassagne la situación extraordinaria, excepcional o urgente debe estar caracterizada por “una necesidad que coloque al gobernante ante la decisión extrema de emitir normas para superar una grave crisis o situación que afecte la subsistencia y continuidad del Estado o de grave riesgo social, en tal sentido, la emisión del acto ha de ser inevitable e imprescindible y su no dictado ser susceptible de generar consecuencias de muy difícil, sino imposible, reparación ulterior. Las circunstancias excepcionales deben serlo de manera objetiva y realmente tales, de modo de evitar que los decretos de necesidad y urgencia sean excepcionales por el mero voluntarismo del presidente o por su urgencia personal o intereses políticos o conveniencia partidaria” (“Sobre la Reserva de Ley y los Reglamentos de Necesidad y Urgencia en la reforma constitucional”, en Revista de Derecho Administrativo, Ed. Depalma, Buenos Aires, 1996, pág. 61/68). Añadimos: no se dictan DU para consumar delitos a granel. Ojalá leyeran este preciso texto argentino Alan García y todos los candidatos en liza en pos de la presidencia. Así recién interiorizarían el desiderátum de un Decreto de Urgencia. 3. Praxis peruana.- Hoy en día en la práctica gubernamental peruana el DU se ha convertido en un instrumento jurídico-constitucional para sustraer fondos millonarios del presupuesto nacional, fuera de toda urgencia, a vista y paciencia de todos; para concesionar puertos o aeropuertos, mejorar avenidas con pavimento, realizar inversiones cuantiosas con aval estatal, etc., por la directa, sin ningún tipo de control. La Contraloría dormita.
Nada de esto resiente a la moral del actual Presidente Alan García, a la prensa, ni a los candidatos presidenciales peruanos Alejandro Toledo, Keiko Fujimori, Luis Castañeda, menos al norteamericano que dejó de ser peruano el año 1982, Pedro Pablo Kuczynski, cuyas almas deben ser el garito de entrañable y regodeante solipsismo.
Estos DU los prostituyeron Fujimori y Toledo, tal como ahora Alan García. Los 03, al unísono conductual, sacaron ingentes fondos del fisco, violando leyes de vigencia permanente, entre ellas la del presupuesto anual de la República. Me atrevería a afirmar que cada Decreto de Urgencia expedido fue un acto de pillaje; ergo, son miles, montones, si contamos los 03 gobiernos últimos. Por eso gustan de regresar al poder, de reelegirse; son de la misma calaña.
4. Para muestra bastan 03 botones.- ¿Sabe usted que para la Avenida Néstor Gambetta del Callao el Decreto de Urgencia N° 052-2009 de 25 de abril 2009 que firma Alan García destina S/.511,574,273.00, ¡más de Quinientos millones de nuevos soles! para el “mejoramiento” de esta sola vía? ¿Es este tipo de norma “extraordinaria”, “excepcional” o “urgente”, para autorizar el uso de tan considerables fondos en mejorar pavimentos existentes y, de remate, encargar el proceso de licitación al organismo internacional UNOPS (Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos), que la Contraloría del anodino Fuad Khoury Zarzar no se atreve a fiscalizar?.
Alan García y Alex Kouri deberán responder penalmente de esta tamaña ratería. También Toledo, a su turno, por los múltiples decretos de urgencia y supremos que dictó al socaire de la inmoralidad. Sólo basta examinarlos uno por uno.
En lugar de blandir el arma homicida para asestar la puñalada; de acechar al modo montesinista para asesinar con impunidad temporal, ahora se valen de los “Decretos de Urgencia”, “Decretos Legislativos” y “Decretos Supremos”, los 03 de sinuoso origen palaciego.
¡Acaban de dictarse los DU N° 001-2011 y 002-2011 (18 y 20-01-2011) que ponen en “concesión-venta” hasta la Isla San Lorenzo, esa que albergaba el reclusorio El Frontón, al lado de 32 proyectos millonarios más! El 002 modifica y amplía el 001, a los dos días de su dación. Ambos disponen la promoción y concesión de proyectos, hasta con entrega de inmuebles del Estado ¡en forma gratuita!. ¡Qué tal doloso regalazo que hace recordar con normal repudio al fugitivo del “canalazo”!.
El propio texto que sigue es prueba del dolo y de la negación de la real naturaleza jurídica de un DU: “disposiciones extraordinarias a ser aplicadas durante el año 2011, para facilitar la promoción de la inversión privada en determinados proyectos de inversión, asociaciones público privadas y concesión de obras públicas de infraestructura y de servicios públicos por parte del Gobierno Nacional….concesión de los siguientes proyectos: 4. Proyecto Isla San Lorenzo-Isla El Frontón”. ¡Esto es negociado con dolo delictivo!
Se cocinan en Palacio de Gobierno y los ministros sólo firman, bajo “apercibimiento” silente de ser removidos; al suscribirlos evitan su remoción. El Derecho Constitucional brindó el medio para prostituir la norma.
Con los Decretos de “Urgencia” (cuya urgencia es de tener la plata fácilmente, porque se agota el período presidencial corrupto) se esquilman fondos inmensos del fisco y con centenares de ellos, que los ministros de economía suscriben y entregan los fondos, como Mercedes Aráoz que no supo ni pudo rechistar a Bipolar cuando estampaba su firma, se concesionan suculentos proyectos de obras públicas de infraestructura y de servicios públicos que evaden controles para la inversión pública millonaria y favorecen la corrupción en grande.
También Fujimori extraía millones de dólares del presupuesto nacional a través de estos ilícitos decretos para comprar aviones de segunda mano de una ex república soviética. Su hija Keiko, que nos amenaza ser nuestra Presidente, amadrinaba la inspección de esas aeronaves. ¿La recuerdan, toda rechoncha ella, al lado de su leptosomático padre, hoy canceroso justo en la lengua? Yo sí, con singular nitidez. Por eso mantengo viva mi cuitada reprobación.