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TRIBUNAL RESTABLECE DEMANDA A SHELL POR MUERTE DE KEN SARO-WIWA

Jueves, 04 de Junio de 2009



LO ÚLTIMO DE DEMOCRACY NOW CON AMY GOODMAN


EL RESTO DE LA HORA DE DEMOCRACY NOW!

  • En un discurso en El Cairo, Obama se muestra a favor de un “nuevo comienzo” en las relaciones entre EE.UU. y el mundo musulmán

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    El presidente Obama dio hoy un discurso muy esperado en El Cairo, Egipto, dirigido a los musulmanes de todo el mundo. Entre varios puntos clave, Obama defendió su decisión de intensificar la ocupación de Afganistán y se negó a pedir perdón por la invasión a Irak, que ha causado la muerte de cientos de miles de personas. Sobre el conflicto israelí-palestino, Obama se negó a pedir una retirada completa de Israel de los Territorios Ocupados pero comparó la lucha de los palestinos con el movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos y afirmó que debería detenerse la construcción de asentamientos israelíes. También reconoció el papel de Estados Unidos en el derrocamiento producido en 1953 del gobierno iraní que había sido democráticamente elegido.

    Escuche/Vea/Lea (en inglés)
  • El profesor Juan Cole y el analista residente en el El Cairo Issandr El Amrani hablan sobre el histórico discurso de Obama

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    El analista independiente residente en El Cairo Issandr El Amrani y el profesor Juan Cole, autor de Engaging the Muslim World (Conectando con el mundo musulmán), analizan el discurso de Obama.

    Escuche/Vea/Lea (en inglés)
  • El calvario del disidente Ayman Nour, que ha sufrido agresiones y encarcelamiento, es el ejemplo perfecto de la represión a la oposición política practicada en Egipto, sistemáticamente ignorada por EE.UU.

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    El presidente Obama llegó a El Cairo en medio de grandes medidas de seguridad y se deshizo en elogios hacia el presidente egipcio Hosni Mubarak, a quien calificó de “aliado incondicional” y de “fuerza de estabilización y de bien de la región”. Escuchamos al ex candidato a la presidencia Ayman Nour, uno de los disidentes egipcios más conocidos y presidente del partido Al-Ghad. Nour fue condenado a cinco años de prisión en diciembre de 2005 y ha sido herido recientemente en un ataque que él vincula a elementos del partido gobernante de Mubarak. La productora de Democracy Now! Anjali Kamat habló con Nour en su domicilio en El Cairo a principios de este año.

VARGAS LLOSA QUERÍA LANZAR SU CANDIDATURA PRESIDENCIAL DESDE CARACAS

Por Winston  Orrillo

La razón non sancta oculta:

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Al volver al Perú, me pregunto el porqué del show mediático internacional de Mario Vargas Llosa, la vedette de los conciliábulos ultraconservadores más esclarecidos, en momentos en que la derecha ecuménica no sabe dónde meter la cara, pues su engendro non plus ultra, el neoliberalismo, ha desatado una crisis económica mundial, más siniestra, aun, que la de 1929.

Me quitó, pues, el sueño el asco de ver el reinado de la mentira, típica arma mediático-fascista, en torno a este asunto que, al final –como veremos-  tenía su razón oculta.

Y todo, respecto a lo sucedido en Caracas, con  la provocadora presencia de aquél y de una troupe de seudointelectuales; una claque, destinada, al parecer, solo a cumplir “la misión” que les había dado –por interpósita vía- el State Department, paranoico por el crecimiento indetenible de los procesos de ruptura del neocolonialismo, en nuestras patrias, otrora su seráfico patio trasero.

Vi los diarios, emporcados por la mentira (menos “La primera”)  y una infame portada de la  revista, Caretas, especializada (¿cuánto hay?) en insultar grosera, cuanto estultamente, al presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, comandante Hugo Chávez Frías.

Aquella carátula pretende una “ingeniosa” paráfrasis de la novela de Vargas Llosa, La guerra del fin del mundo, que transforma en La guerra del fin del mono, con su reconocida proclividad racista.

Pero la madre del cordero es la falacia, que los seguidores fieles del lema nazifascista ( miente, miente, que algo queda), crearon, para esta ocasión, al fabricar aquello de que “Chávez convocó a una polémica de la que luego se corrió”.

¡Absoluta mentira!

Y lo escribe alguien que participó en el totalmente silenciado (por ellos,“liberales y objetivos” ) foro caraqueño, Encuentro Internacional de Intelectuales frente a la crisis del Capitalismo, que contó con la participación de  varios premios internacionales de literatura, el Ministro de Cultura de Cuba, escritor Abel Prieto, una vice ministra de Bolivia, y por supuesto el Ministro del Poder Popular para la Cultura de Venezuela, H. Soto, organizador del evento, junto con la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad. A su lado, pues, hubo personalidades de reconocido prestigio, como Fernando Buen Abad,  Héctor Diaz Polanco, Gilberto López y Rivas, y Ana Esther Ceceña,  de México; Luis Britto , Iraida Vargas, Mario Sanoja e Iradia Vargas, de Venezuela; Hernando Calvo Ospina, de Colombia; Hugo Moldiz de Bolivia, así como Tania Temoche y James Earley, del Perú y USA, respectivamente.

De aquí surgió la iniciativa de polemizar con los intelectuales del neoliberalismo, que habían sido convocados, en non sancto aquelarre, por el CEDICE (Centro de Divulgación del Conocimiento Econòmico), que gerencia la contrarrevolucionaria venezolana, Rocío Guijarra, presente en el abortado golpe de Estado de abril de 2002, organizado para detener el curso ya victorioso de la Revolución Bolivariana.

Lo que planteamos era  coherente: desafiamos a una polémica a la troupe de tarifados difamadores del proceso venezolano (al que V. Llosa llamó, entre otros despropósitos, de “izquierda troglodita”).

Así lo entendió el Presidente Chávez, quien ofreció  su Programa semanal de TV, “Alo, Presidente”,  para que este diálogo se viabilice.

Todo parecía natural, pero emergió el sinsentido: “polémica, sí, pero entre nuestro Marito, y el dictador “tropical”.

Esto fue, de suyo, rechazado por nosotros como una insolencia y una muestra de megalomanía del escribidor de marras y su cohorte.

Pero nos equivocamos.

La verdad era otra, y aquí la revelamos.,

El fallido show mediático del escribidor, tenía como propósito utilizar a Caracas como catapulta para su lanzamiento como candidato a la presidencia de la república del Perú.

Para ello cuenta con los latifundios mediáticos, totalmente a su servicio, y, asimismo, con su propio fraseo, pues hace poco calificó la situación electoral ad portas del Perú como el dilema entre el cáncer y el sida, vale decir entre Ollanta Humala y Keiko Fujimori, la hija del sátrapa, condenado, por el momento, a 25 años de cárcel efectiva.

Al que dice amar el diálogo, al que lo exige plañideramente, le recordamos que el Comandante Humala, el candidato con mayor arrastre popular, le pidió dialogar para explicarle su programa, a lo que el de la Casa Verde, ni siquiera le contestó.

Esta conclusión electorera del escribidor de marras, la sacamos por su coro de áulicos que, más o menos sotto voce, se  ha pronunciado en este sentido. Véase el artículo de Mirko Lauer “MVLL: ¿otra vez en el partidor”, La República, 30-05-09; y el de un turiferario de García –premiado con la dirección de la Biblioteca Nacional- y que escribiera que si salía, en el proceso electoral anterior, Ollanta Humala, el país, la patria, se  hundirían. Ahora,  Hugo Neira -tal su nombre- en su artículo “Caracas: la cosa es grave”, en el mismo diario, hoy, 02-06-09, escribe: “…pobres de nosotros si en el 2011, votos populares creyendo salvar la nación convierten al Perú, después de Bolivia y Ecuador, en otra provincia del chavismo”- Y acaba con un cinismo melodramático: “Yo no tengo ninguna ambición personal. Lo único que quiero es no quedarme sin patria”.

Apocalíptico, este señor, en pleno ejercicio de lo justamente llamado terrorismo mediático. La misma estulticia política deviene grave, porque este “intelectual”, formado en Francia, es de la misma camada que los que fueron a Caracas, y es un magíster del figuretismo.

 De aquí a proponer el lanzamiento  electoral de V.Llosa, del que Neira es catecúmeno,  no hay sino un paso.

El paso que va a consistir en pedirle al celestino de Ucchuraccay   rogarle al autor de La tía Julia, que salve al Perú de la plaga populista que advendría con Humala o del retorno de la caricatura tragicómica que fue la sátrapía de Fujimori.

V.Llosa, refresquemos la memoria, fue el  que  avaló la matanza de nuestros colegas periodistas, en las serranías de Ayacucho, con el subterfugio de que los indios ignorantes fueron los culpables, cuando es consenso que ellos fueron asesinados por orden del Gobierno de turno.

Este panorama –y la idea pertenece a mi denostado e invisibilizado amigo Ricardo Badani- se aclara, mucho más, con la toma, ayer, por el Gobierno, del canal 5 , Panamericana TV, con el pretexto de las deudas –que sí que las tenía- con la SUNAT (entidad que administra los tributos).

Ése es el camelo: el substrato es la necesidad del Régimen de detentar todo el espectro mediático para imponer un candidato, ya que el desprestigio de su gente es paradigmática, y el compromiso –público- del actual Presidente es impedir que salga elegido alguien que atente contra el sacrosanto Establishment, léase capitalismo salvaje.

En este caso Vargas Llosa, conocido por su proclividad con el Poder, y servil impertérrito con y para el Capitalismo, al impulso del grito de guerra, que proviene de Wáshington DC, “no más gobiernos del pueblo, por el pueblo y  para el pueblo”; el Premio Jerusalén, deviene la última esperanza frente al derrumbe mundial de  los parámetros conservadores.

¡Basta de Cubas, Venezuelas, Bolivias, Ecuadores, Nicaraguas, Paraguayes….!

Respeto a la propiedad privada, no a la estatización….pero como vemos ellos –los neoliberales- no respetan a aquélla y usan de ésta (cuando les conviene: para salvar a los bancos o imponer su voluntad política, al precio que fuere, como en el caso del Perú de ahora mismo).

Todos los dimes y diretes del grupúsculo de provocadores tarifados- acaecían mientras nosotros, en Caracas, asistíamos a una sesión abierta de Aló, Presidente, convocada para celebrar  su X Aniversario.

Durante el programa, vimos cómo, en los otrora barrios miserables de los suburbios, los venezolanos acceden a la condición humana,  dueños de su futuro, mediante el goce pleno de salud,  educación y cultura, gratuitos, y con el desarrollo de una nueva concepción de valores. pues no se trata solo de transformar la economía o las leyes, sino de lograr un hombre nuevo, bajo la égida del pensamiento de su presidente: “Analfabetismo, cero; pobreza, cero; hambre cero: ésa es la gran misión de la vida”.

Porque cuando uno ha vivido, en las Plazas Bolívar y Altamira,  la alegría de ver en manos del pueblo miles de libros regalados, entonces vemos cómo se hace realidad el pensamiento de José Martí:

Ser cultos, para ser libres.

Y, finalmente, como una concesión y a pedido de él mismo, se le planteó al grupo ultramontano que el gran escritor bolivariano Luis Britto García, podría polemizar con el autor de La Tía Julia.

Pero éste hizo mutis por el foro.

Lo que él y su cáfila querían era el show mediático para que pudiera, auspiciosamente, lanzar su candidatura presidencial, avalado por su condición de exorcista de tiranos que solo su afiebrada y maniaca mente crea.
 
Pero el castillo de cartas (marcadas) en este caso, se les derrumbó.

 
La Calera, Lima,  Junio de 2009

FORO PERMANENTE DE LA ONU EXIGE QUE PERÚ CUMPLA CON DERECHO A LA CONSULTA A FAVOR DE PUEBLOS INDÍGENAS

El Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU, organismo asesor del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, a través de su presidenta, Victoria Tauli Corpuz, expresó su preocupación sobre los informes recibidos durante su octavo período de sesiones en relación a los abusos que viene cometiendo el gobierno peruano en contra de los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades nativas.

La Presidenta, en declaración oficial, le recordó al Gobierno peruano la obligación que tiene de consultar y respetar los derechos de los pueblos indígenas, tal y como lo establecen los compromisos asumidos en el Convenio 169 de la OIT.

En la misma línea, manifestó que siendo el Perú el país que lideró las negociaciones sobre la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y apoyó activamente la aprobación de la Declaración, debe garantizar el pleno respeto de los derechos de las comunidades sobre las tierras tradicionales, territorios y recursos, así como el consentimiento libre, previo e informado de las mismas.

En otro momento, la (funcionaria) expresó su profunda preocupación por el estado de sitio decretado por el gobierno peruano desde el 8 de mayo de 2009 en contra de las comunidades y organizaciones indígenas. “El estado de sitio está dando lugar a la suspensión de las libertades personales y políticas de los pueblos indígenas en la región amazónica, la criminalización de los líderes indígenas y defensores de los derechos humanos y la creciente militarización de los territorios indígenas”, enfatizó Tauli Corpuz.

Como resultado de lo expuesto, el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas pidió al Gobierno peruano suspender inmediatamente el estado de sitio; evitar cualquier acción, como la intervención militar, que podría aumentar el conflicto; y cumplir con sus obligaciones nacionales e internacionales relativas a la protección de los derechos humanos, incluidos los derechos de los pueblos indígenas y defensores de los derechos humanos.    

La vergonzosa historia de la OEA (II Parte)


Oscar Sánchez Serra (GRANMA)

La OEA contra Cuba. Complicidad y legitimación interamericana de las agresiones de Estados Unidos contra el pueblo cubano. El combate de Raúl Roa por la dignidad.

El 18 de marzo de 1959, a solo dos meses y medio de la victoria popular del Primero de Enero, el nuevo Embajador de Cuba ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Raúl Roa García, exponía la posición que iba a definir en lo adelante la relación entre la triunfante Revolución y el organismo hemisférico: [...] En largos años no se había erguido y escuchado la voz genuina de Cuba en el Consejo de la OEA. [...] No resulta ocioso recordarlo por lo que tiene de novedad histórica y de obvio estímulo a los pueblos todavía oprimidos. El derrocamiento de una tiranía mediante la acción armada no es un suceso insólito en nuestra América; sí lo es, en cambio, la que derribó la de Fulgencio Batista en Cuba.

Me voy con mi pueblo, y con mi pueblo se van también de aquí los pueblos de nuestra América, expresó Raúl Roa en defensa de la dignidad.

Esta posición cubana partía del conocimiento de su liderazgo revolucionario sobre la ya para entonces breve y triste historia de la OEA, al servicio de Estados Unidos, que desde enero de 1959 había diseñado un plan para utilizar a la organización en contra de la Revolución y de nuestro pueblo. Hasta ese momento, ningún mecanismo multilateral o regional había infringido o tratado de infringir más daño a un país que el de la OEA a Cuba.

La denominada "cuestión cubana" ocupó un lugar prioritario en la agenda de la OEA y, de conformidad con los intereses de Estados Unidos, comenzó a sentar las bases para el aislamiento político-diplomático de Cuba y la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), para intentar "legitimar" una agresión militar directa contra Cuba.

En agosto de 1959, los Gobiernos de Brasil, Chile, Estados Unidos y Perú, solicitaron la convocatoria de una Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores para abordar la situación en el Caribe. La Revolución había promulgado la Primera Ley de Reforma Agraria, eliminando los grandes latifundios, entre ellos los de la United Fruit, en la que tenían intereses económicos los hermanos Allan Dulles, Secretario de Estado, y Foster Dulles, jefe de la CIA.

La V Reunión de Consulta, en Santiago de Chile, no adoptó ningún documento condenando a nuestro país, pero creó el "marco conceptual" que serviría a los propósitos de la política yanki contra nuestra nación; estableció la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y la Comisión Interamericana de Paz recibió nuevas facultades, lo cual formaba parte de la estrategia de creación o perfeccionamiento de herramientas que serían claves en la aplicación de directrices yankis contra Cuba en el seno de la OEA.

Las reuniones se sucedían unas tras otras y Roa, prevenido de los objetivos de esas citas sobre el Caribe, declaró, primero en Washington: El Gobierno de Cuba está convencido que todas esas acusaciones lo que pretenden es crearle a Cuba un ambiente internacional hostil, y organizar en Cuba una conjura internacional de tipo intervencionista, a los efectos de interferir, obstaculizar o malograr el desarrollo de la Revolución cubana. Remataba luego en San José sus palabras con una acusación reveladora: Si de hacer justicia se trata, debería sancionarse, conjuntamente, a Trujillo y al gobierno de Estados Unidos.

Conjura y vindicación en San José

Del 22 al 29 de agosto de 1960 se realizó en San José, Costa Rica, la VII Reunión de Consulta. Entre los puntos de su agenda aparecía el fortalecimiento de la solidaridad continental y del sistema interamericano, especialmente ante las amenazas de intervención extracontinental, y la consideración de las tensiones internacionales existentes en la región del Caribe, para asegurar la armonía, la unidad y la paz de América, entre otros.

La cita adoptó una Declaración que en sus párrafos operativos 4 y 5 señalaba que ...el Sistema Interamericano es incompatible con toda forma de totalitarismo y que la democracia solo logrará la plenitud de sus objetivos en el continente cuando todas las repúblicas americanas ajusten su conducta a los principios enunciados en la Declaración de Santiago de Chile y todos los Estados miembros de la Organización regional tienen la obligación de someterse a la disciplina del sistema interamericano, voluntaria y libremente convenida y que la más firme garantía de su independencia política proviene de la obediencia a las disposiciones de la Carta de la Organización de Estados Americanos.

En San José quedaron establecidas las condiciones necesarias, conforme a los términos yankis, para imponer la exclusión del gobierno cubano. En protesta, al anunciar la decisión de retirarse de aquel vergonzoso conciliábulo, el Canciller Roa sentenció con una memorable y contundente frase la ruptura definitiva con la OEA: [...] Los gobiernos latinoamericanos han dejado a Cuba sola. Me voy con mi pueblo, y con mi pueblo se van también de aquí los pueblos de nuestra América.

En respuesta a los resultados de la Reunión de San José, más de un millón de cubanos reunidos en la Plaza de la Revolución en histórica Asamblea General del Pueblo de Cuba, adoptaron la I Declaración de La Habana, mediante la cual se rechazaron las pretensiones hegemónicas de Estados Unidos contra Cuba, su política de aislamiento y el servilismo de la OEA ante esas patrañas.

La expulsión y el intento de aislamiento

En diciembre de 1961 el Consejo Permanente de la OEA decide, a solicitud de Colombia, convocar la VIII Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores para enero de 1962 (del 22 al 31), en Punta del Este, donde se adoptaron nueve resoluciones, cuatro de ellas contra Cuba, pero la IV era la "joya" de la OEA, titulada Exclusión del actual Gobierno de Cuba de su participación en el Sistema Interamericano, que era la máxima aspiración yanki para deslegitimar en lo político y diplomático a nuestra Revolución. La resolución fue aprobada con 14 votos afirmativos (Estados Unidos tuvo que comprar el voto de Haití para obtener la mayoría mínima), uno en contra —Cuba— y seis abstenciones: Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador y México. Las dos últimas naciones expresaron que la expulsión de un estado miembro no procedía, pues no existía una reforma previa de la Carta de la organización.

El entonces presidente, Osvaldo Dorticós, levantó la bandera que había alzado antes, en aquel mismo escenario, el Canciller de la dignidad Raúl Roa: [...] Si lo que se pretende es que Cuba se someta a las determinaciones de un país poderoso, si lo que se busca es que Cuba capitule, renuncie a las aspiraciones de bienestar, progreso y paz que animan su revolución socialista y entregue su soberanía, si lo que se intenta es que Cuba vuelva la espalda a países que le han demostrado una amistad sincera y un respeto cabal; si, en una palabra, se intenta esclavizar a un país que ha conquistado su libertad total después de siglo y medio de sacrificios, sépase de una vez: Cuba no capitulará. [...] Vinimos convencidos de que se tomaría una decisión contra Cuba pero eso no afectará el desarrollo de nuestra Revolución. Vinimos para pasar de acusado a acusador, para acusar al culpable aquí, que no es otro que el gobierno imperialista de Estados Unidos. [...] la OEA se hace incompatible con la liquidación del latifundio, con la nacionalización de los monopolios imperialistas, con la igualdad social, con el derecho a la educación, con la liquidación del analfabetismo [...] y en ese caso Cuba no debe estar en la OEA. [...] Podremos no estar en la OEA, pero Cuba Socialista estará en América; podremos no estar en la OEA, pero el gobierno imperialista de los Estados Unidos seguirá contando a 90 millas de sus costas con una Cuba revolucionaria y socialista [...].

Derrotado en Girón en 1961, fracasados los planes de la Operación Mangosta que condujeron a la Crisis de Octubre de 1962, con el bloqueo económico, comercial y financiero ya proclamado y con bandas terroristas combatiendo en las montañas del Escambray, a Estados Unidos le quedaba solo internacionalizar su abyecta política, para lo cual se vale de la IX Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores, en Washington en julio de 1964, mediante una resolución inspirada en el TIAR, que ya había desplazado a la Carta de la OEA, disponiendo que los gobiernos de los Estados Americanos rompieran sus relaciones diplomáticas o consulares con el Gobierno de Cuba. Solo México mantuvo una posición digna y no se plegó a los designios del imperio.

La carta democrática y el fracaso de una mala política

Justo el 11 de septiembre del 2001, cuando se desplomaban las torres gemelas en Nueva York, se promulgó la Carta Democrática Interamericana, la más reciente y solapada maniobra yanki contra Cuba en la OEA, la cual estableció las reglas que estaban obligados a seguir los países para ser miembros del bloque hemisférico. Antes no se podía ser marxista-leninista; ahora había que adoptar como requisito la democracia representativa burguesa y el "Dios Mercado". En el fondo, se promovía, de forma similar, la exclusión de nuestro país.

Pero la Revolución ingresó al siglo XXI vencedora del más largo y cruento asedio que pueblo alguno ha conocido en la historia de la humanidad. Es un símbolo de que los poderes imperiales no son omnímodos ni eternos. La nobleza y voluntad de nuestro pueblo es reconocida en todo el planeta. La OEA había fracasado rotundamente.

Cuba tiene fluidas relaciones diplomáticas con todas las naciones del hemisferio y fue aclamada en el Grupo de Río, porque ningún pueblo del continente nos excluyó jamás. Nuestro país no se asustó, no claudicó, no cambió un ápice su decisión soberana, no negoció su libertad, su independencia y su libre determinación. No es una posición de ultranza, es un principio, y fue fijado por Raúl Roa en agosto de 1959 al decir: [...] La Revolución Cubana no está a la derecha ni a la izquierda de nadie: está al frente de todos, con posición propia e inconfundible. No es tercera, ni cuarta, ni quinta posición. Es nuestra propia posición.

Ver también:
La vergonzosa historia de la OEA (Parte I)


La vergonzosa historia de la OEA (I Parte)


Oscar Sánchez Serra (GRANMA)

Surgimiento y trayectoria de la Organización de Estados Americanos. Contexto histórico de su aparición y fundamentos jurídicos, políticos e ideológicos en que se constituyó. Papel desempeñado en la región.

Desde su despegue como nación, los Estados Unidos de América contrapusieron siempre al ideario de unidad e integración latinoamericana su pretensión de dominación continental, ambición plasmada el 2 de diciembre de 1823 en la conocida Doctrina Monroe, sintetizada en la frase "América para los americanos".

La OEA nace con el sello de la represión contra los pueblos.

No fue hasta el último cuarto del siglo XIX, que esa filosofía pudo desplegarse, cuando la industria estadounidense creció como ninguna otra hasta alcanzar la condición de potencia en acelerado ascenso, con lo cual pretendía no solo la dominación del continente, sino que creaba las condiciones para lanzarse a la lucha por una nueva redistribución del mundo.

Ya a finales de 1889, el gobierno norteamericano convocó la Primera Conferencia Panamericana, que fue el punto de partida del "panamericanismo", visto como el dominio económico y político de América bajo la supuesta "unidad continental". Ello implicaba una actualización de la Doctrina Monroe en el momento en que el capitalismo norteamericano arribaba a su fase imperialista. José Martí, quien fue testigo excepcional del surgimiento del monstruo imperialista, se preguntaba a propósito de aquella Conferencia: ¿A qué ir de aliados, en lo mejor de la juventud, en la batalla que los Estados Unidos se preparan a librar con el resto del mundo? Y tenía razón. Entre 1899 y 1945, durante ocho conferencias similares, tres reuniones de consulta y varias conferencias sobre temas especiales, se fue estableciendo el avance de la penetración económica, política y militar de EE.UU. en América Latina.

Auge del panamericanismo monroísta

A finales de la II Guerra Mundial, de la que EE.UU. salió beneficiado, se inicia una etapa de auge del Panamericanismo y del Sistema Interamericano que va desde la Conferencia de Chapultepec en 1945, pasando por la creación de la OEA en 1948, hasta la invasión a República Dominicana en 1965, consolidándose la subordinación de los gobiernos del continente a la política exterior de EE.UU.

Así, la Conferencia Interamericana sobre Problemas de la Guerra y la Paz, de Chapultepec, en marzo de 1945, tuvo un objetivo político definido: alinear a los países de la región para enfrentar el proceso que vendría con la creación de la ONU.

Como resultado, en la conferencia de San Francisco, en abril de 1945, en la cual se funda la ONU, la diplomacia norteamericana, apoyada por los países latinoamericanos, defendió la "autonomía" para el Sistema Interamericano y logró que en el artículo 51 de la Carta de la organización mundial se preservara la solución de controversias mediante métodos y sistemas "americanos". La interpretación que le dio el Consejo Directivo de la Unión Panamericana es que dicha Carta nació compatible con el Sistema Interamericano y el Acta de Chapultepec.

En agosto de 1947, la Conferencia Panamericana de Río de Janeiro aprobó una resolución que dio origen a la herramienta que daría vida a la cláusula de permisividad arrancada a la ONU: el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), que reafirmaba el principio de "solidaridad" continental esgrimido por Washington, en función de enfrentar cualquier situación que pusiera en peligro "su paz" en América y adoptar las medidas necesarias, incluida el uso de la fuerza. Con el TIAR se impone la voluntad yanki en el continente, constituyendo una amenaza permanente para la soberanía de los países latinoamericanos.

Como colofón, entre el 30 de marzo y 2 de mayo de 1948 la Conferencia Internacional Americana de Bogotá, da vida a la Organización de Estados Americanos (OEA). En medio de esa reunión es asesinado el líder liberal colombiano Jorge E. Gaitán, de gran arraigo popular, hecho que motivó una gran insurrección conocida como el Bogotazo, brutalmente reprimida y que sirvió para manipular el curso y los resultados de la Conferencia, al promover EE.UU. la amenaza que significaban para la democracia el "auge" de la Unión Soviética y el comunismo, al que culpaban por las muertes del Bogotazo.

Pero tanto la Conferencia de Río como la de Bogotá coincidieron con una agudización de los problemas económicos en América Latina, cuyos países —entusiasmados con el Plan Marshall para Europa—, empezaban a demandar uno de asistencia para la región. Mas el propio Secretario de Estado, George Marshall, se encargó de defraudarlos.

De la discusión y adopción de la Carta de la OEA surgió un extenso documento de 112 artículos, firmado sin reservas por los veintiún países participantes en Bogotá. La Carta hacía suyos algunos de los principios cardinales y justos del derecho internacional, sin embargo, a instancias de Washington, se le introdujeron disposiciones que trasladaron a la OEA los postulados principales del TIAR, por lo cual, desde su cuna, la OEA es el instrumento jurídico ideal para la dominación estadounidense en el continente.

Su retórica diplomática relativa a los postulados sobre la independencia y soberanía de las naciones y los derechos del hombre y de los pueblos, han quedado como letra muerta.

Páginas de un expediente sangriento

En 1954 Guatemala fue invadida por tropas mercenarias organizadas por la CIA, que derrocaron al gobierno de Jacobo Arbenz. La OEA se había prestado antes para aprobar una resolución que introducía la variante de intervención colectiva regional, en expresa violación de su propia Carta y la de la ONU. Ante el hecho consumado, el organismo se limitó a "dejar hacer" a EE.UU. y dilató el examen de la situación, ignorando los intereses del país agredido.

La actuación respecto a Cuba a partir del triunfo de la Revolución, el apoyo a la invasión de Playa Girón en 1961, las acciones que desplegó en el orden político-diplomático para aislarnos, que concluyeron con la expulsión de nuestro país en enero de 1962 y la ruptura de relaciones diplomáticas de los países de la región con la Mayor de las Antillas, significaron un nivel de ensañamiento tal, que puso más en entredicho a la organización.

En abril de 1965 desembarcaron los marines yankis en Santo Domingo para impedir la inminente victoria del movimiento popular constitucionalista sobre las fuerzas de la reacción militarista. La OEA envió a la capital dominicana a su Secretario General, el uruguayo José A. Mora, con el aparente propósito de obtener una tregua entre los beligerantes, mientras el Órgano de Consulta dilataba una decisión para facilitar que las fuerzas militares yankis tomaran el control de la situación. Luego de múltiples gestiones, Estados Unidos logró por el estrecho margen de un voto la aprobación de una resolución que dispuso la creación de una Fuerza Interamericana de Paz, produciéndose, por primera vez bajo el sello de la OEA, una intervención colectiva en un país del área.

La OEA, que tenía entre sus postulados básicos el principio de no intervención de ningún Estado en los asuntos internos de otros, continuaba en crisis de credibilidad.

Marzo de 1982 trajo la intervención británica que dio inicio a la Guerra de las Malvinas y a la primera agresión de una potencia extra continental a un país del Sistema Interamericano, lo que, según el TIAR, debía convocar la solidaridad continental con el agredido. ¿Y... ? los Estados Unidos apoyaron política y militarmente a Gran Bretaña e impusieron sanciones económicas contra Argentina. ¿Y la OEA qué? demoró su reacción, adoptó una tibia resolución llamando al cese del conflicto y solo un mes más tarde condenó el ataque armado e instó a los EE.UU. a que levantara de inmediato las medidas aplicadas a Argentina".

Y más, en octubre de 1983 un golpe militar derrocó al primer ministro granadino, Maurice Bishop, quien murió asesinado a manos de los golpistas. A Granada también EE.UU. envió una fuerza invasora de 1900 infantes de marina que tomaron el control de la isla. El principio de no intervención volvía a carecer de validez. En la OEA, la mayoría aprobó esa acción como "medida preventiva", mientras otros la rechazaron. Finalmente se condenó la invasión por catalogarla como violatoria de la Carta de Bogotá.

La bancarrota del panamericanismo

El fin de la llamada Guerra Fría y la desintegración de la URSS cambiaron la geopolítica mundial y la OEA, exigida por Estados Unidos, intentó reacomodarse con el objetivo de serle más fiel a las oligarquías, por lo que comienza en 1991 a promover los preceptos de la democracia representativa burguesa y del neoliberalismo. Bajo esas banderas nacen las Cumbres de las Américas, a iniciativa de EE.UU., las que otorgaron renovados mandatos a la organización.

En este momento sobresale la creación de la Carta Democrática Interamericana en 1992, que llevó a nivel de tratado la imposición del unipolarismo a la región, es decir la OEA no cambió su cara, tanto que frente al golpe militar en Haití, que depuso al presidente Jean Bertrand Aristide, exhibió el mismo grado de incapacidad y putrefacción. Delegó el tema en el Consejo de Seguridad de la ONU, que aprobó una fuerza militar multinacional ¿liderada por quién? por EE.UU.

Ya en pleno siglo XXI, a nadie le quedan dudas de la irrelevancia, obsolescencia y descrédito de una organización que ha sido cómplice de los principales crímenes de Estado ocurridos en América Latina y el Caribe en la segunda mitad del siglo XX. A pesar de que en ocasiones Estados Unidos la relegó, nunca la descartó. La necesita viva para influir y dividir a la región y frenar la consagración de su único, inevitable y verdadero destino histórico: la integración martiana y bolivariana de sus pueblos.

Foto: Estados Unidos - USS George Washington (CVN 73), portaaviones de la clase Nimitz. / Autor: US NAVY


IV CUMBRE AMAZONICA EN TARAPOTO‏

Wawqikuna, Panikuna, Hermanos y Hermanas:

Somos una Nación con dignidad y no permitiremos que el "criollo peruanero" nos siga maltratando. 
Sin embargo, no hay que perder nunca la "perspectiva  historica" de nuestras luchas, y si no se solucionan los problemas, allí en la raíz en donde se originan, estas después de cada tiempo nos golpearan en el rostro.

Maduremos las condiciones objetivas y  subjetivas para la LIBERACIÓN NACIONAL, sin ello estaremos siempre condenados al abuso, la explotación y ser parias gregarias en nuestro propios territorio.


 
KAWATSUN ANTISUYU !!!!

KAWATSUN TAWANTINSUYU !!!!

QUE VIVA  EL ESPIRITU GUERRERO DE LOS AMAZONICOS

VIVA LA LIBERACION NACIONAL DE TAWANTINSUYU

Cuba declina la oferta de la OEA, pero la llama "gran victoria"

Cuba calificó el jueves la decisión de la OEA de eliminar su suspensión como una "gran victoria", pero dijo que no "modifica en nada" su negativa a volver a la organización del que fue expulsada hace 47 años.

Los 34 países de la Organización de Estados Americanos (OEA) derogaron el miércoles en la ciudad hondureña de San Pedro Sula una resolución que apartó en 1962 a Cuba por presión de Estados Unidos.

"Creo que es una gran victoria para América Latina y el Caribe. Es también (una victoria) para el pueblo de Cuba", dijo a los periodistas en La Habana el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón.

El ex presidente cubano, Fidel Castro, ha insistido durante los últimos meses en que la OEA es un instrumento de dominación de Estados Unidos y debe desaparecer.

La televisión estatal dijo en la noche del miércoles que la decisión de la OEA es una "reparación histórica", pero aclaró que La Habana no está interesada en regresar al grupo.

"No sé cuántas veces hemos dicho lo mismo: lo que ha ocurrido ayer (miércoles) no modifica en nada lo que Cuba pensaba ayer, anteayer y hasta hoy", dijo el jueves Alarcón.

La resolución adoptada el miércoles por la OEA aclara que el regreso de Cuba debería ser resultado de un proceso de diálogo a pedido del Gobierno de la isla.