AQUIJE INFORMA, DESDE SANTIAGO DE CHILE .
En el segundo cómputo difundido por el subsecretario del Interior, Patricio Rosende, sobre el 59,99% de los sufragios emitidos, Piñera obtuvo el 44,23% de los votos.
Piñera de 60 años, es un economista con un doctorado en Harvard, en las pasadas elecciones presidenciales del 2005 también pasó al balotaje junto a la socialista Michelle Bachelet, que lo derrotó por siete puntos, ahora podría correr la misma suerte.
Frei, un ingeniero civil de 67 años, que gobernó entre 1994-2000, llega hasta este momento a un 30,5%.
El diputado Marco Enríquez-Ominami, se convierte en la tercera fuerza con 19,39%, y el ex socialista Jorge Arrate, que representa a una coalición liderada por izquierdistas convencionales, tiene un 5,86%.
Enríquez-Ominami, 36 años, abandonó el Partido Socialista en junio último porque le prohibieron participar en las primarias que convirtieron a Frei en el abanderado oficialista.
La aventura electoral de Enríquez-Ominami, que vivió exiliado en París hasta los 13 años, restó votos a Piñera y más a Frei y congregó a los descontentos con la concertación oficialista, en el poder desde 1990.
Las encuestas y los analistas pronosticaron que ningún candidato obtendría el 50% más uno de los sufragios para evitar la segunda vuelta, y en efecto así fué." Esta elección es mucho más sobre quién dirigirá el país que sobre la dirección que tomará el país. La gran sorpresa de esta elección es que todos los candidatos están proponiendo políticas bastante similares", dijo a los medios de comunicación el analista y académico Patricio Navia.
Además de la elección presidencial, se renuevan los 120 diputados y la mitad de los 38 senadores. El congreso está dominado ahora por la oposición derechista, porque algunos senadores y diputados abandonaron la Concertación de cuatro partidos oficialistas y crearon un referente nuevo o se declararon independientes.
Por primera vez la Concertación pactó con el Partido Comunista (PC), que está fuera del congreso porque la ley electoral heredada del pasado régimen militar favorece los grandes bloques partidarios, y llevó candidatos a diputados en distritos donde el oficialismo se abstuvo de llevar los suyos.
Si el PC obtiene al menos un diputado, su presidente Guillermo Teillier, llamará a sus seguidores a votar por Frei en segunda vuelta. Si no gana ningún parlamentario, es probable que la decisión quede en manos de cada militante.
Los votos obtenidos por Enríquez-Ominami podrían favorecer a Frei no por pedido expreso del parlamentario sino por un natural acercamiento ideológico,además el ex-Presidente sumaría los votos del Partido Comunista.
"La segunda vuelta...va a ser igual que las dos últimas presidenciales: muy estrecha, muy cerrada, con la única diferencia que por primera vez, la primera posibilidad la tiene un candidato opositor", señaló el analista y académico Ricardo Israel.
Agregó que la fuerte diferencia entre Piñera y Frei no es decisiva en el balotaje porque "se va a producir un desvío natural de los partidarios de Arrate y de la gran mayoría de los partidarios de Marco Enriquez-Ominami a favor de Frei, una gran movilización del gobierno y de los empleados públicos, lo que obliga a pensar que la diferencia que va a sacar Piñera en la primera vuelta, no se va a repetir en la segunda, que va a ser muy peleada".
Arrate llamó hace un par de semanas a Enríquez-Ominami y a Frei a unirse en un frente para evitar el triunfo de Piñera en el balotaje. Frei aceptó el llamado el miércoles, pero Enríquez-Ominami se negó tajantemente. Sin embargo, el domingo por la mañana se abrió a la posibilidad de negociar con Frei.